Web 2.0 versus burbuja 2.0
Vía Enrique Dans:
Como habréis visto los habituales, llevo una buena temporada escribiendo sobre las características de la llamada Web 2.0 y sus connotaciones y comparaciones con respecto a la burbuja Internet de finales de los noventa, dando lugar a lo que se ha dado en llamar Burbuja 2.0. La preocupación por este tema, tanto por las posibles consecuencias de una hipotética burbuja como por las derivadas de que mucha gente piense que ésta existe son, por lo que puede verse, claramente generalizadas.
Loïc LeMeur se descuelga hoy con una entrada para mí genial por su claridad de análisis,"Differences betwwen Web 2.0 and Bubble 2.0", en la que aparecen prácticamente todas las piezas que llevamos tiempo comentando al hilo de la próxima celebración en París de LeWeb 3.0, en donde por cierto estaré. Su motivación para escribirla es el temor a que algunas personas estén efectivamente intentando construir la Burbuja 2.0 encima de la Web 2.0, de manera que, como comentaba recientemente Joi Ito, estemos pasando
"... de hablar de una plataforma para el futuro de la web, a hablar de una plataforma para el futuro a corto plazo de una serie de gente muy codiciosa."
Para Loïc, lo verdaderamente diferencial acerca de la Web 2.0 proviene de la llamada "revolución amateur" (traduzco directamente de su entrada):
Publicación sencilla:
2.0, todos podemos publicar textos, fotgrafías y vídeos de manera muy sencilla, tan fácil como enviar un correo electrónico
1.0, era complicado, había que manejar herramientas de construcción de páginas, temas de hosting, y demasiado código html. La novedad es la simplicidad.
Accesible:
Los amateurs 2.0 pueden dar a conocer su contenido fácilmente, y algunos de ellos alcanzan audiencias apreciables gracias a la eficiencia de unos motores de búsqueda que facilitan la aparición de una larga cola de la distribución de audiencias.
Los motores de búsqueda 1.0 enviaban la mayor parte de su audiencia a sitios de noticias masivos y marcas conocidas como la CNN y similares. Ahora, el contenido amateur tiene la misma voz, o en algunos casos incluso más.
Control de tus datos:
En 2.0 tu contenido te pertenece (como en Second Life), y puedes exportarlo o recuperarlo con gran facilidad (como en Flickr, Typepad...)
En 1.0, cuando subes tus datos, el sitio al que los has subido los poseen y no te dejan recuperarlos fácilmente (sobre esto escribió recientemente Joi Ito una muy buena entrada titulada "Is YouTube Web 2.0?"
Al hilo de las teorías de David Weinberger, uno de los autores del Cluetrain Manifesto, el reciente éxito de la Web 2.0 se debe fundamentalmente a la explotación de unos principios relativamente novedosos, algo que él denomina "Small Pieces Loosely Joined": una red formada por muchos pequeños grupos que trabajan conjuntamente alrededor de una serie de estándares abiertos, una comunidad de gente tratando de interconectar sus diferentes proyectos, en lugar de intentar construir barreras a la movilidad como se hacía en la web 1.0. Según Joi, los sitios que no respetan ese último punto, en los que es preciso recurrir a herramientas externas desarrolladas por terceros para extraer o recuperar el contenido, como YouTube, pertenecen claramente a la Burbuja 2.0. En ese sentido, creo que la reciente adquisición de Google podría avanzar algunos aspectos en ese sentido, que coincide con recientes declaraciones que comentamos anteayer de Eric Schmidt. A diferencia de YouTube, en Google Video sí se puede bajar el contenido, aunque sea con un reproductor propio).
Cualquiera de las entradas citadas y esta otra de Hugh MacLeod, que comenta el tema hoy, son de muy recomendable lectura. O esta otra de Rogelio Bernal, exactamente en el sentido contrario, que viene bien para tener un buen contrapunto.
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