Precio único acabaría con depredación de librerías en México
Vía: http://www.cronica.com.mx/nota.php?id_nota=358994Para Marcelo Uribe, editor, escritor y actual subdirector de Ediciones Era, la cosa es muy sencilla: si no se pone un precio único al libro el fenómeno de depredación de librerías continuará hasta situarnos en un panorama mucho más sombrío que el actual.
Y es que, mencionó, ante los enormes descuentos de las grandes cadenas que al final son falsos pues se aplican a un precio inflado, las pequeñas librerías (algunas especializadas) no tienen nada que hacer y pues desaparecen. Tenemos que hacer algo, al menos detener la tendencia, alertó.
Según cifras de la UNESCO, el 40 por ciento de las librerías en México ha cerrado en los últimos 35 años. Y otra estadística: mientras que en Argentina hay una librería por cada siete mil habitantes y en Estados Unidos una por cada 20 mil, en México tenemos un por cada 180 mil.
Esto es algo muy grave, porque en estas tres décadas la población ha crecido considerablemente. Mientras que la población sube, las librerías han decrecido. De hecho caminar por el Centro Histórico, es hacerlo en un cementerio de librerías.
Y fue aquí que se quejó de los grandes consorcios: En realidad estamos siendo discriminados por el mercado. Pues si compramos el ejemplar en otro lado que no sea el gran almacén, tenemos que pagarlo mucho más caro; se podría decir que es como una multa.
Pero este no es el único problema. A decir de Uribe hay otro igual de grave. Y es que, razona, si hay pocas librerías, quién va a ofrecer el gran número de novedades que existe actualmente. El gran almacén sólo se interesa por los que les aseguren una gran venta, pero no por los otros.
El editor independiente Alejandro Zenker fue más allá y dijo que incluso un gran número de librerías no garantizan la exhibición de diversos títulos.
Creo que la ley del libro sí puede promover la creación de más puntos de venta en el país, pero eso no forzosamente se traducirá en que esas librerías nos lleven a tener una mayor diversidad de títulos. Estas librerías van a reproducir lo que ya estamos viviendo, que venden sólo lo que les dejará más ganancias. Es decir, no se diversificará la oferta.
Y es que por grande que sea la librería, no van a poder exhibir todos los títulos existentes, ni siquiera todas las novedades.
Zenker, quien es director general de Solar Servicios Editoriales, agregó: El precio único es un paso importante que puede contribuir a que mejore la situación general de la industria editorial de la cadena que lleva la palabra del autor al lector. Sin embargo, soy muy escéptico. No creo que el precio único sea la respuesta ni la panacea que vaya a resolver los problemas de fondo que tenemos y que estamos sufriendo.
Por su parte, Alejandro Ramírez, gerente de Compras de la librería Gandhi, también se mostró a favor de la ley. Es verdad que queremos hacer negocio, pero también que el país progrese.
En Gandhi, por ejemplo, vendemos tanto libros que sabemos se van a vender muy bien, como obras de editoriales independientes e incluso ediciones de autor. Todos reciben el mismo trato.
A nosotros nos convendría que hubiera muchas librerías, pues con eso mejoraría el mercado editorial y, por ende, las ventas. Sabemos que tal vez somos la mejor distribuidora de libros, pero no la única.
A principios de abril, el Senado retomó la ley del libro, luego de que fuera vetada por Vicente Fox, alegando que afecta la libre competencia y que esto desplazaría a los vendedores de libros al menudeo.
Los puntos de la ley
1 Establece para la SEP y el Conaculta la obligación de participar en la formación de lectores.
2 Establece para la SEP y el Conaculta la obligación de determinar el Programa de Fomento para el Libro y la Lectura.
3 Establece como obligación de la SEP la dotación de acervos para las bibliotecas de aula y escolares, lo que garantiza la supervivencia de este programa.
4 Establece el Consejo Nacional de Fomento para el Libro y la Lectura, espacio de concertación entre los diversos eslabones de la cadena del libro: autores, editores, impresores, papeleros, distribuidores, libreros, bibliotecarios, lectores.
5 Establece el sistema de precio único.
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