Los editores auguran que el soporte digital sustituirá a los libros

En la segunda jornada del «XXII Encuentro sobre la edición y el editor ante los nuevos desafíos de la propiedad intelectual» celebrado dentro de los Cursos de Verano de la Universidad Menéndez Pelayo de Santander, se abordó la función de las nuevas tecnologías, como internet, desde un punto de vista realista, llegándose a la conclusión de que la adaptación a estos medios es fundamental para el futuro del sector, aunque sin perder de vista la función del editor como garante de calidad de los contenidos que se publiquen o se «cuelguen» en la red. Francisco Cuadrado, director de las Ediciones Generales del Grupo Santillana, dijo que «se avecinan cambios para el mundo editorial».
Citando a Umberto Eco, distinguió entre dos tipos de libros, «los que se leen y los que se consultan», y son los segundos los que más se están digitalizando. Se trata de libros de cocina, de viajes, etc, «que van a hacer que los podamos ver troceados en los iPod o en los móviles», lo que provocará un nuevo fenómeno: la venta parcial de libros. Según Cuadrado el soporte digital «sustituirá al papel». «Tenemos que pensar en términos de multisoporte», recalcó Cuadrado en su intervención.
Obras huérfanas. Antonia Kerrigan, agente literaria, habló sobre la legalización del «Opt-Out», que es escanear libros para después, si alguien reclama sus derechos y los tiene, negociarlos, en vez de pedirlos previamente. El problema surge porque muchos de los libros publicados son «obras huérfanas cuyos depositarios de derechos de autor son imposibles de localizar». Según Kerrigan el «60 por ciento de los libros tiene un “copyright” poco claro y si la justicia norteamericana se decanta por el “Opt-Out”, elmundo también lo hará». Entonces las editoriales no tendrán más remedio que negociar «con los grandes buscadores que hasta ahora se negaba a ver». Ana Nuño, poeta y directora literaria de Reverso ediciones, criticó «la democratización a ultranza de los contenidos». Algo contra lo que tiene que luchar el editor, «que es quien permite alimentar con contenidos culturales el mercado».